-La vida es bella-continuó diciendo-cuando te consume, mientras te empuja y te destruye; entonces la vida es maravillosa; pero cuando te quema con fuego lento, escatimando los combustibles, entonces no vale la pena.
-¿Cree usted, pues, mejor una vida corta pero alegre? Preguntó el padre.
-No es necesario que sea corta, ni alegre. El dolor es una parte integrante del fuego de la vida, y el sufrimiento es el origen de la llama de la alegría. En la vida nos parecemos a aquel hombre que, preocupado en llegar a la vejez, murió de inanición a los treinta años.
DH Lawrence. Un amor moderno.
1 comentario:
Bello texto de D.H.Lawrence.Recuerdo en mi juventud como leía a este autor con fruicion,exaltado por un corazón hambriento de belleza y pasión.
Un abrazo amigo.
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