jueves, 15 de noviembre de 2007

Aplicación del pensamiento de Ortega en Biología: Unamuno.


Pregunto: ¿Tiene algo que ver lo que decía Ortega en la entrada anterior acerca de la vida con la biología?.

¿A dónde debe orientarse el quehacer del biólogo hoy?.

Paradójicamente, la respuesta no viene de un biólogo, sino de otro filósofo.

Dice Unamuno:

“Si, si, lo veo; una enorme actividad social, una poderosa civilización, mucha ciencia, mucho arte, mucha industria, mucha moral, y luego cuando hayamos llenado el mundo de maravillas industriales, de grandes fábricas, de caminos, de museos, de bibliotecas, caeremos agotados al pie de todo eso y quedará, ¿para quién? ¿Se hizo el hombre para la ciencia, o se hizo la ciencia para el hombre?.”


La conciencia humana ha de estar siempre por encima de la ciencia y de la tecnología. Ambas han de obedecer a un criterio humanista y moral:

“¿He de volver a hablaros de la suprema vaciedad de la cultura, de la ciencia, del arte, del bien, de la verdad, de la belleza, de la justicia….., de todas estas hermosas concepciones, si al fin y al cabo, dentro de cuatro días o dentro de cuatro millones de siglos-que para el caso es igual-, no ha de existir conciencia humana que reciba la cultura, la ciencia, el arte, el bien, la verdad, la justicia y todo lo demás así?”

2 comentarios:

El Doctor dijo...

El viejo cascarrabias,solitario,osado y genial que fué a buscar refugio a la Universidad de Salamanca.Su pensamiento,hoy,todavía me guía por estos derroteros.Mis obras favoritas siguen siendo: Vida de don Quijote y Sancho,Diario íntimo y Es sentido trágico de la vida,del cual suscribo,casi a diario,éste párrafo: "Así,el teléfono puede servirnos para comunicarnos a distancia con la mujer amada.Pero ésta,¿para qué nos sirve?Toma uno el tranvía eléctrico para ir a oir una ópera,y se pregunta:"¿Cuál es en este caso,más útil,el tranvía o la ópera?"

Gracias por tus cálidos comentarios en mis viejos post,que por otra parte,escribí desde la soledad y la desesperación.Al final fuí a Singapur.No lo pasé muy bien porque soy más bien de cafés,librerías de viejo y de paseos con las manos en los bolsillos.

Por cierto;Unamuno solía dormir más de nueve horas diarias,pero se excusaba diciendo que cuando estaba despierto,lo estaba más que los demás.
Un abrazo amigo.

Emilio Cervantes dijo...

Las frases citadas arriba son de el sentimiento trágico de la vida, un libro que voy leyendo y releyendo en ocasiones como esas en que uno necesita encontrarse en lo que lee. En esos momentos de soledad que habrás conocido, que te habrán sido familiares como le serían también al cascarrabias ese de mi vecino......